Recorridos por la memoria
- Ricardo Robayo y Alejandra Gaviria
- Obra
- Contexto
Fotografías, videos y objetos personales hacen parte del proyecto llamado Recorridos por la memoria. El título hace explícita la intención de este trabajo: a través de la reunión de elementos escogidos y dispuestos en el espacio de exhibición los creadores del proyecto (Organización H.I.J.O.S.) proponen un camino y guían al espectador a través de las vidas de víctimas del conflicto en Colombia. Se recuperan historias asociadas con tres personas: Guillermo Rivera Fúqueme líder sindical y miembro de la Unión Patriótica desaparecido y luego asesinado el 22 de abril de 2008. Fair Leonardo Porras un joven de Soacha quien fue asesinado y presentado como guerrillero dentro de los mal llamados “Falsos Positivos” el 8 de enero de 2008; y por último el caso de la “Vereda la Esperanza” en el Carmen de Viboral – Antioquia, donde fueron desaparecidos varios familiares de Doña Flor Gallego: su esposo Hernando de Jesús Castaño (Caficultor) y sus hermanos Juan Carlos Gallego Hernández (Promotor de Salud) y Octavio Gallego Hernández (Carpintero) entre el 7 y 9 de julio de 1996. Estas tres historias particulares tienen la cualidad de ser referencias que apelan a las condiciones generales del conflicto armado interno de Colombia, reflejan las dificultades de las familias y sus luchas por denunciar, resistir al desdén y el olvido, mostrar lo que sucedió y pedir justicia.
La violencia de la guerra se ha manifestado en Colombia de distintas maneras durante los últimos 50 años. Los grupos y condiciones de las víctimas han sido igualmente diversos. Unos de los sectores que han sido blanco de los rigores del conflicto han sido los líderes sociales, sindicales y políticos, y defensores de los derechos humanos, cuyos esfuerzos han sido inconvenientes para los grupos armados y algunos actores de las esferas política y económica. Se han presentado casos como el de la líder Yolanda Izquierdo, quien tomó la vocería de 843 familias de desplazados que en medio del proceso de Justicia y Paz reclamaban las tierras de las que fueron despojados en Córdoba. Fue asesinada en su casa en enero del 2007, a los 43 años, a manos de paramilitares, lo que puso en entredicho la calidad de la protección que recibían las víctimas reclamantes.
Asimismo, la guerra se ha ensañado con los grupos sindicales, sobre todo en años crudos como el 2000, cuando se presentaron 274 asesinatos. Esa ha sido la consecuencia, entre otros factores, de la estigmatización en Colombia de la que han sido víctimas los líderes laborales, defensores de derechos humanos y, sobre todo, aquellos que defienden las ideas de la izquierda. Lo anterior se hizo evidente en uno de los capítulos más vergonzosos de la historia del país: el exterminio de la Unión Patriótica. El genocidio consistió en los asesinatos sistemáticos a líderes políticos de ese partido, formado luego de los diálogos de paz entre las Farc y el gobierno de Belisario Betancur, durante 1985.