Exhumaciones : Museo de Memoria de Colombia

Exhumaciones

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Exhumaciones es una exposición itinerante de fotografías, performance y objetos que reconstruye memorias de los sectores sociales LGTB (lesbianas, gays, transgénero y bisexuales), víctimas del conflicto armado en los Montes de María. Mediante fotografías y objetos simbólicos creados a partir de testimonios de violencia sexual y de género, el visitante tiene la oportunidad de comprender la barbarie que ha vivido un sector de víctimas históricamente marginado y silenciado, así como de reconocer la importancia que tienen sus acciones de resistencia y valentía. En palabras de Tania Blanco, integrante del Colectivo Antónima: “Quisimos desde nuestro quehacer artístico, como artistas visuales, ahondar y contribuir a la reparación simbólica de esta población”.

La exposición Exhumaciones es uno de los proyectos ganadores de la III Convocatoria Nacional de Propuestas Artísticas y Culturales de Memoria 2016 , realizada por el CNMH y la dirección de Museo Nacional de la Memoria del CNMH.

En agosto de 2016 el Colectivo Antónima, conformado por los artistas Tania Blanco y Aldo Hollmann, inició una investigación sobre la violencia que ha sufrido la comunidad LGTB en los Montes de María. Partieron de archivos periodísticos, documentos académicos e informes como Aniquilar la diferencia, publicado por el Centro Nacional de Memoria Histórica. Más adelante, tras una serie de encuentros y talleres en los municipios del territorio Sucreño ( San Onofre, Chalán, Ovejas y Sincelejo), el Colectivo Antónima y las víctimas participantes, exploraron y reconstruyeron simbólicamente los testimonios y recuerdos de la violencia sexual y de género que han tenido que vivir y que desafortunadamente también han tenido que ocultar por la discriminación de la sociedad colombiana.  El Colectivo propuso usar el performance y la fotografía como elementos mediadores y recursos narrativos para reconstruir los relatos de las víctimas. El resultado es una serie de 80 fotografías acompañadas por objetos que evocan la poca visibilidad de estas memorias.

La población LGBT ha sido víctima de diferentes delitos por parte de los grupos armados involucrados en el conflicto por su orientación sexual e identidad de género. Según documentó el CNMH en su informe “Aniquilar la diferencia. Lesbianas, gays,bisexuales y transegeneristas en el marco del conflicto armado colombiano ”, entre las múltiples formas de violencia, los actores armados han cometido violaciones sexuales contra lesbianas y hombres trans con el objetivo de  “corregir” su orientación sexual y con la idea de que “no le han enseñado lo que es un buen macho”. En el RUV (Registro Único de Víctimas), con fecha de corte a 31 de julio de 2015, se identifican 1.795 personas con orientaciones sexuales e identidades de género no hegemónicas. Sin embargo, las víctimas y organizaciones sociales han insistido en que estas cifras no corresponden a la realidad y que son significativamente más altas.

 

Aunque en el 2012 el FUD (Formato Único para la toma de Declaración) diseñado por la UARIV (Unidad para la Atención y Reparación Integral de las Víctimas), incluyó una casilla para identificar en los registros la orientación sexual o la identidad de género de las víctimas, su diligenciamiento ha sido irregular. Muchas personas prefieren ocultar esta información por vergüenza, por seguridad o por experiencias previas en las que han sido maltratadas cuando la han hecho pública ante otras entidades. La atención a estas víctimas ha sido inadecuada, en gran parte porque los funcionarios y las funcionarias no tienen la formación ni la voluntad política necesarias para comprender la realidad de los sectores LGTB.

Además, muchas personas con orientaciones sexuales e identidades de género diversas no reconocen la violencia ejercida por los actores armados como un tipo de violencia diferente a las que suelen enfrentar a diario por parte de su comunidad.  Las organizaciones sociales de los sectores LGBT, como Colombia Diversa, han tenido un papel fundamental en el registro de las violencias sufridas por las personas de estos sectores, y han avanzado en su registro de manera independiente.